El viernes pasado ocurrieron un montón de eventos relevantes: we tripantu, inicio oficial del invierno, luna llena en capri y el lanzamiento de la canción ‘The girl, so confusing version with lorde’, de la Charli XYX con la Lorde. A moment in pop culture.
La canción es un remix de una de las canciones de BRAT, el celebrado nuevo álbum de la Charli (the girls and the gays ya lo sabrán). La canción original, titulada ‘Girl, so confusing’, es excelente por sí sola. En ella Charli le habla a una amiga, inicialmente no identificada, y le dice “a veces creo que puede ser que me odies, a veces creo que puede ser que te odie, quizás tan solo quieras ser yo”.
Agh, desde que reparé en los lyrics me encantó. Siento que es una retórica refrescante sobre las relaciones humanas, especialmente las amistades entre mujeres. Yo al menos no la había escuchado en la cultura pop mainstream. Por el contrario, llevo años observando, con cierta incomodidad la verdad, que los principales discursos en torno a las amistades entre mujeres son super buenistas y moralizantes. Todo entre las amigas tiene que ser amor, ternura y brillitos; no resulta concebible que una amiga sienta rabia, resentimiento, inseguridad, ni hablar un dejo de maldad, hacia la otra1.
No me malentiendan, mis amigas son de los vínculos más importantes de mi vida. Las que tengo ahora y las que he tenido en el pasado. He vivido, en contextos de amistades femeninas, momentos de profunda conexión, sanadora vulnerabilidad, extasiada emancipación y auténtica diversión. Pero son también de mis relaciones más intensas, y en momentos, son complejas y desafiantes. Aquello me parece normal, propio de un vínculo tan jevi como es el que se teje entre dos (o más) mujeres. Sin embargo, hallo que impera en nuestro imaginario colectivo femenino una idea, una carga moral casi, de que las relaciones entre mujeres deben ser de pura confianza y admiración recíproca, de constante sintonía y disposición.
Si bien lo son así en sus mejores momentos, creo que es imposible pretender que solo sean eso, o que las humanas que componen tal vínculo sientan exclusivamente idolatría y celebración por sus amigas todo el rato. Hay más tenuidades que eso, creo.
La canción de Charli introduce esas tenuidades a la representación cultural de las amistad entre mujeres. Encontré valiente su honestidad, porque es mucho más fácil declararse una amiga soñada e ideal frente al mundo, que reconocerse insegura, sintiente de emociones no positivas a la otra.
Mucha especulación generó quién era la persona a la que interpela la canción. Previo al lanzamiento del remix, Charli dijo esto al respecto:
Estaba muy consciente cuando puse la canción en el disco que inmediatamente las personas lo verían como un algún tipo de diss track. Pero en realidad, si te das el tiempo de escuchar el contenido liríco, ese no es para nada al caso. La canción es acerca de sentirse confundida sobre donde te encuentras en una relación con otra mujer, y no sobre atacar la personalidad ni cualquier otro atributo de esa otra persona. Y creo que la cosa es que ser una mujer es muy complejo y que estamos viviendo en esta época en donde se te estima una mala feminista si no te llevas bien con cada una de las mujeres con las que te encuentras y en realidad las cosas no son tan simples. No solo amas a alguien u odias alguien; hay tantas emociones entre esos dos muy drásticos límites del espectro. Puedes sentir amabilidad hacia una persona pero también sentirte intimidada por ellos; puedes ser amistosa con alguien pero también no conocerlos; puedes sentirte insegura al lado de alguien un minuto, y luego increíblemente segura el siguiente. Y creo que esta canción solo está hablando de que es en verdad complejo ser una mujer en una época en la que se supone que debes ser una cosa para ser una “buena mujer”.
Soy fan de que la Charli haya hablado de cómo se suele caracterizar a la amiga que no cumple esos estándares idealizados de ‘mala feminista’. Hace varios años ya, se instaló de forma generalizada en nuestra cultura la reflexión feminista de que es el patriarcado el que hace a las mujeres sentirse como competencia entre ellas, proponiendo como alternativa a esa competencia, la sororidad. Todo esto me parece una valiosa conquista cultural del feminismo, por cierto que sí. Cuando en mi temprana juventud alguna mujer me enseñó de este análisis, me sentí completamente fascinada, y casi purificada: parecía ser que todas las animadversiones que jamás había sentido hacia otras mujeres eran culpa del patriarcado, y no expresiones de las estrecheces de mi corazón! Otra salvación del feminismo, qué deleite.
Pronto comprobé que no era tan así. En mis vínculos con mujeres siguieron existiendo, aunque muchas cosas maravillosas, también emociones y situaciones complejas, que no calzaban en este ideario de amistades sororas soñadas que por unos instantes pensé que me correspondía tener como mujer feminista.
Cuando el viernes salió el remix de la canción quedé en auténtico shock. Primero por lo icónico de la colaboración. Pero en segundo por el verso INCREÍBLE de la Lorde.
En él, Lorde explica que mientras la Charlie pensaba que ella la odiaba, ella estaba atrapada en sus propios rollos, en su cabeza, en sus inseguridades. Qué cosa más real, por la mierda. Y que bien se siente ese recordatorio, que en las amistades hay individualidades que atraviesan sus propios momentos y procesos. Al mismo tiempo, Lorde no niega ninguno de los sentimientos (de odio y anhelo de caída) que le atribuye la Charli en la canción, lo que también me pareció realísimo de la Lorde. Puede ser que los haya sentido: Lorde se había olvidado que detrás de la ícona había una joven chica de Essex…
Dejo el verso de la Lorde, que es mis lyrics favoritos de lo que va de año (es tan exquisitamente meta además2):
Well honestly I was speechless
when i woke up to your voice note
you told me how you’d feelin
let’s work it out on the remix
You’d always say let’s go out
but then i’d cancel last minute
i was so lost in my head
and scared to be in your pictures
Cause for the last couple of years
i’ve been at war with my body,
i tried to starve myself thinner
and then gained all the weight back
I was trapped in the hatred
and your life seemed so awesome,
i never thought for a second
my voice was in your head.
GIRL! you walk like a bitch
when i was ten someone said that
and it’s just self-defence
until you are building a weapon
She believed my projection
and now i totally get it
Forgot that inside the icon
there’s still a young girl from Essex
He visto que muchas chicas han encontrado en esta canción el ánimo de reconectarse con sus ex amigas y work it out on the remix. Por mi parte, me sentí más bien reafirmada en cómo habían decantado esas historias. Hay veces que la complejidad de las relaciones desemboca en quiebres. Y también está bien que así sea.
Por ejemplo, en TikTok está plagado de videos de chicas hablando de “signos de que tu amiga te odia” (y los signos son literalmente que tu amiga no te pone likes a tus fotos de instagram o que no estaba para celebrarte durante algún éxito tuyo), o “si tú te amiga no te alegra cuando brillas, córtala de tu vida” o “todas tenemos una amiga que es en secreto una hater y que en realidad quiere verte caer”.
El let’s work it out on the remix y en el precoro, cuando anticipan que la internet enloquecerá cuando pongan su conflicto a la cama.